El conjunto dirigido por Antonio Conte no pudo superar a un correoso Sporting de Lisboa y dejó abierto a la última jornada uno de los grupos más divertidos de la Champions League

Tottenham Hotspur y Sporting de Lisboa firmaron las tablas (1-1) en el Tottenham Hotspur Stadium. Un estadio que se mostraba con un gran ambiente de fútbol inglés y donde se necesitaba la victoria para llegar aliviados a la última jornada en esta fase de grupos.

Pero, como ya se avecinaba tras el sorteo, el grupo D está dando mucho que hablar, donde la igualdad es máxima. Cualquiera de los cuatro equipos puede ser todavía primero de grupo y cualquiera puede caer eliminado de esta Champions, por lo que se espera una última fecha muy difícil para cualquiera de los cuatro combinados.

El Sporting dejó claras sus intenciones en el encuentro

Pese a ser un equipo de menor rango respecto a las cinco grandes ligas europeas, el Sporting de Lisboa dio una buena imagen en el día de ayer en tierras inglesas. El conjunto dirigido por Rubén Amorim no se dejó llevar durante el encuentro y disfrutó de claras ocasiones en ambas partes para poder haberse llevado el encuentro.

Ya en los primeros minutos, el Tottenham ofrecía una versión muy ofensiva, donde buscaba presionar alto y provocar dificultades en la salida de balón rival. Pero el conjunto portugués supo tener paciencia y así generaron sus mejores ocasiones. Algunas tan claras como la del gol. En el minuto 22 de encuentro, un zapatazo sorprendente de Edwards se colaría en las mallas de Hugo Lloris para hacer el primero del encuentro.

La afición local no se lo podía acabar de creer como empezaba a escaparse un partido, en teoría sin grandes dificultades, a un Tottenham con grandes figuras atacantes.

Bentancur lo empató y el VAR quitó la victoria ‘Spur’

Pero, al comienzo de la segunda mitad, las ideas serían otras. Los chicos de Conte salieron con una propuesta más ofensiva en busca del empate y eso se notó desde el minuto 46. Cuando quedaban quince minutos para el final, un centro puesto por Perisic lo aprovecharía Bentancur para poner las tablas en el marcador, tras una mala salida del guardameta español, Antonio Adán.

A partir de aquí y hasta el final del choque, la propuesta fue exhaustiva por parte de los locales. Sabían que si lograban materializar los tres puntos lograrían el objetivo de colarse entre los dieciséis mejores de Europa. Y en el descuento, aparecería salvador Harry Kane para darle los tres puntos a su equipo. Pero todo quedaría anulado por una posición de fuera de juego, tal y como se lo indicaron desde la sala VAR al árbitro principal.

Y con ello llegó la expulsión de Antonio Conte. Tras celebrar efusivamente el gol de la ‘posible’ victoria, el entrenador se mostró enfadado con la decisión tomada por el VAR y esto le llevó a ser expulsado, tras unas palabras con el colegiado principal. Al final, reparto de puntos en Londres, donde ambos deberán ganar en la última jornada si quieren estar en los octavos de Champions League.